martes, 21 de abril de 2009

para la señorita lectora de Maitena

Como usted sabrá, soy quizá un desentendido en la materia (sobre la historieta Maitena), por eso me he tenido que ver en la situación de consultarlo con algunas amistades femeninas, de las cuales he encontrado discersiones disparejas aunque tal vez cosas en común. Lo más interesante es lo irónico al parecer sobre esta historieta y ya veo hacia a dónde apunta UD. y cómo podrá acabar dentro de algunos no alejados años.
Ahora bien, exactamente no sé a dónde se perfila esta entrada, o qué es lo que voy a decir al final o en el fondo. Es que no tenga qué decir, sólo que las cosas aún están como en una especie de trámite o pasando bajo el escrutinio de muchas personas que al parecer ni siquiera están en este juego.
Déjeme decirle que escribo, que aún mis palabras se columbran sobre el lapicero y la tinta. Que la nostalgia es una invitada bien recibida y a la vez odiada. Las noches son mas largas que los días, las palabras puede que se vayan alargando y diciendo cositas cada vez más pequeñas y poco entendibles, eso puede ser un argumento a mi escrito o una simple excusa de la cuál no sé salir.
No pretendo ser una persona de soluciones a todo (el "todo" se lo dejo a cualquier otra persona que quiera tomar el mando y navegar sobre la radical nada hacia el algo). No pretendo cargarle con excusas, ilusiones, dramatismo de milímetros a milímetros. Pretender no es lo mío señorita, yo no busco la persona que me cambie que me quiera distinto, sin o con zapatos. No requiero vestirme de animal emplumado, ni cargar baúles apabullados de formas y conductas tan ricas y sonoras de esta susodicha vida.
Lo que yo quiero decirle finalmente señorita, es que no me cambie y que nadie la cambie porque en eso está el gusto de ser uno.




P.D.: este texto aún está en crecimiento.

2 comentarios:

CRISTINA dijo...

Me gustaría tanto saber a quién va dirigido este escrito. Cómo es ella, por qué esas palabras, qué te ha hecho y qué no...qué pretende de tí y qué no dejas que pretenda...

Ahí queda, una curiosidad (o directamente cotilleo) que supongo nunca será satisfecha.

Un beso.

Jimmy dijo...

Espero que la señorita se dé por enterada ;-)