tímida y avergonzada
dejé que me quitaras lentamente mis vestidos,
desnuda
Sin saber qué hacer y muerta de frío
me acomodé entre tus piernas
¿es la primera vez?
preguntaste,
sólo pude llorar.
oí que me decías que todo iba a salir bien
que no me preocupara,
yo recordaba las largas discusiones de mis padres,
el desesperado llanto de mi madre
y su voz diciéndome
"nunca confíes en los hombres".
Comprendiste mi dolor
Y con infinita ternura
Cubriste mi cuerpo con tu cuerpo,
tienes que abrir las piernas, murmuraste,
y yo me sentí torpe y desolada.
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7 comentarios:
qué tierno, mi amor.
encima le pones el tag de 'eros'...terrible eres.
q bueno eres lexessssssssss
muakkkkkkkkkkk
ya no existe
Hola Sebas!
Tengo mi blog descuidado y casi nunca lo revisaba :( ... hasta que decidí cambiar de dirección y plantilla, échale un vistazo cuando puedas. http://gemacantarero.com
Gracias por tu comentario en mi post de la emokid!
Sobre tu entrada:
Interesante relato o poema :)
En fin, gracias x leer el blogcito este y por acá estaré leyendote de vez en cuando
Saludos!
Uffff, SEbastián.
Sin aliento, sin aire me he quedado después de leer.
Ese poema es como un golpe. De ternura, quizás, pero un golpe.
Besos.
Junto a "La muchacha mala de la historia" es lo mejor de María Emilia Cornejo.
María Emilia... no merece que algunos poetas convertidos en viejas pitucas digan que fue un fraude...
saludos!
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