Echó café
en la taza.
Echó leche
en la taza de café.
Echó azúcar
en el café con leche.
Con la cucharilla
lo revolvió.
Bebió el café con leche.
Dejó la taza
sin hablarme.
Encendió un cigarrillo.
Hizo anillos
de humo.
Volcó la ceniza
en el cenicero
sin hablarme.
Sin mirarme
se puso de pie.
Se puso
el sombrero.
Se puso
el impermeable
porque llovía.
Se marchó
bajo la lluvia.
Sin decir palabra.
Sin mirarme.
Y me cubrí
la cara con las manos.
Y lloré.
miércoles, 26 de mayo de 2010
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3 comentarios:
¡Gracias!
Es curioso que este poema, uno de los más bonitos y desde luego de los más conocidos de Prévert, ¡¡es la primera vez que lo leo en español!! Se me ha hecho raro...
Besos
me gusta mucho
me gusta mucho
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